top of page

Bolero

Qué vanidad imaginar 
que puedo darte todo, el amor y la dicha, 
itinerarios, música, juguetes. 
Es cierto que es así: 
todo lo mío te lo doy, es cierto, 
pero todo lo mío no te basta 
como a mí no me basta que me des 
todo lo tuyo.

Por eso no seremos nunca 
la pareja perfecta, la tarjeta postal, 
si no somos capaces de aceptar 
que sólo en la aritmética 
el dos nace del uno más el uno.

Por ahí un papelito 
que solamente dice:

Siempre fuiste mi espejo, 
quiero decir que para verme tenía que mirarte.

Y este fragmento:

La lenta máquina del desamor 
los engranajes del reflujo 
los cuerpos que abandonan las almohadas 
las sábanas los besos

y de pie ante el espejo interrogándose 
cada uno a sí mismo 
ya no mirándose entre ellos 
ya no desnudos para el otro 
ya no te amo, 
mi amor.

- Julio Cortázar

© 2016 por Obra para un Escritor.

bottom of page